“Si piensan que con eso apagarán el fuego.. están muy equivocados” dijo ayer la secretaria general de la Federación Departamental de Trabajadores con respecto al anunciado encuentro entre los presidentes regionales de Cusco y Arequipa para analizar el tema Majes Siguas II.Martha Quispe Taboada dijo ayer que al Presidente García le preocupa la reunión multisectorial del próximo 31 de enero a la cual se sumará el gobierno regional de Apurímac para emprender una lucha conjunta en contra del proyecto arequipeño.
En ese entender pretende buscarle una salida convocado a los dos presidentes regionales con la finalidad de que los acuerdos del próximo 31 de enero y la probable huelga indefinida en toda la región, no se ejecuten.
Quispe Taboada expresó claramente que entre ambos presidentes regionales no puede haber ningún acuerdo pues Jorge Acurio de Cusco ha demostrado hasta hoy que defiende los intereses de la región y su derecho al agua mientras que Juan Manuel Guillén no tuvo reparo en acudir a las instalaciones de Pro Inversión para firmar el contrato del proyecto mistiano.
“Yo no sé qué acuerdo se podría tomar entonces si ambos presidentes tienen las cosas definidas”, señaló la secretaria general de la FDTC aclarando que no está en contra de dicho encuentro.
Para ella cualquier reunión en saludable. La idea es recibir al presidente regional de Arequipa con los honores respectivos por su investidura pero dejarle bien en claro que la posición del Cusco es una sola: la anulación del proyecto de irrigación Majes Siguas II basado en el sustento técnico de la universidad nacional San Antonio Abad del Cusco que lo declara inviable.
Martha Quispe solicitó entonces al presidente regional Jorge Acurio a mantenerse en alerta y evitar la firma de cualquier documento que podría devenir luego en un compromiso como los tantos que ya fueron firmados por el ex representante regional Hugo Gonzáles. “Al final nos dimos cuenta de la traición”, recordó la secretaria general de la FDTC.
Tampoco se trata de generar oposiciòn por oposiciòn a un simple dialogo, la dirigente de la FDTC sabe que hace mucho tiempo el movimiento gremial en el Cusco esta totalmente fraccionado por aspectos de tipo personal, sobre los cules ella misma tiene que reflexioonar. Es verdad que las ùltimas manifestaciones no fueron desastrozas, sin embargo la mayor participaciòn que destaco fue la del sector pùblico que en forma organizada se movilizo por las arterias de nuestra ciudad, logicamente, los dirigentes estuvieron, pero estuvieron diferenciados. Hay que imitar los ejemplos del pùeblo arequipeño que cuando esta en juego sus intereses, la unidad es obligada y disciplinada.
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