Mi hijo no quiere ir al colegio: ¿Qué hacer?

Compartir

Que los niños se nieguen a ir al colegio es una situación que puede generar tensión y conflictos entre padres e hijos.“Iniciar la escuela es una etapa de ansiedad para los niños y toma tiempo adaptarse. Por lo general el rechazo escolar se da en el nivel inicial y los primeros grados de primaria. La sensibilidad de los padres a las emociones del niño será clave para ayudar lo”, afirma la terapeuta familiar Patricia Rocha.

Los motivos del rechazo pueden ser diversos. “Muchos casos están relacionados con dificultades para separarse del hogar, sobre todo de la madre, y es frecuente en pequeños que asisten por primera vez a la escuela. Esto es transitorio y se resuelve con el acompañamiento gradual a la nueva situación”, explica la especialista. Raquel Silberman, psicóloga de la clínica Javier Prado, señala otras causas de la resistencia al colegio.

“En la educación primaria, el rechazo puede darse por falta de habilidades sociales del pequeño, lo que dificulta que se integre al grupo. Asimismo, este puede tener un bajo desempeño escolar y sentirse incómodo porque sus compañeros se burlan de él. Y otro motivo podría ser el ‘bullying’, es decir, que el niño sufre agresiones físicas o verbales de algunos de sus compañeros”.

Identifique la causa para buscar una solución adecuada. Es importante que los padres conversen y exploren qué está pasando con sus hijos para que se nieguen a ir al colegio. Es vital coordinar con los profesores para tener una percepción desde el colegio de la situación.

“Haga una evaluación personal, pregúntese: ¿Está pasando algo en casa que pueda estar afectando a mi hijo?”, indica María Isabel Cifuentes, psicóloga clínica de la Asociación Taller de los Niños.

PARA TENER EN CUENTA

Comunicación constante

La comunicación de los padres con los hijos debe ser constante, no solo cuando existe o detecta algún problema. “Hay que estar atentos a cómo van los chicos en el colegio, en su rendimiento y en las relaciones con sus profesores y amigos”, aconseja la psicóloga María Isabel Cifuentes, de la Asociación Taller de los Niños.

La terapeuta familiar Patricia Rocha indica que se debe distinguir la ansiedad o rechazo escolar de la fobia escolar. Esta última se caracteriza por un alto nivel de angustia en los niños y el sentimiento de culpa que les genera el faltar al colegio, porque entienden que deben asistir. En el caso de fobia escolar, se necesitará atención especial e incluso terapia psicológica.