Más de 10 mil personas se manifestaron en Dannenberg, Alemania, contra un convoy con residuos radiactivos que avanza hacia el depósito atómico de Gorleben.
La protesta pacífica, bajo el lema "Paren la locura", es la primera de grandes dimensiones organizada este fin de semana, a donde se estima que acudirán cerca de 40 mil manifestantes en total, la mayor concentración de los últimos años.
El tren, con 123 toneladas de residuos radiactivos vitrificados en once contenedores especiales "Castor", salió el último viernes de la planta de reprocesamiento de La Hague, Francia, e ingresó a Alemania este sábado bajo estrictas medidas de seguridad.
Por ello, la policía alemana movilizó 16 mil 500 efectivos, debido a los continuos bloqueos de las vías del ferrocarril para frenar el convoy a lo largo de los mil kilómetros de trayecto en tren por tierras alemanas hasta Dannenberg.
La canciller alemana Angela Merkel criticó los bloqueos de vías y los sabotajes y el portavoz del grupo parlamentario de Los Verdes, Jürgen Trittin, en contra del transporte, instó a los activistas a manifestarse de forma "pacífica".
La ruta del tren
El tren se detuvo en Estrasburgo para cambiar equipo de seguridad y locomotoras, y atravesó por sorpresa el puente de Kehl para evitar el bloqueo de los activistas.
Cerca de mil activistas antinucleares esperaban el tren de basura radiactiva en los alrededores de la ciudad de Berg, unos 60 kilómetros más al norte, por donde estaba previsto en un principio que circulase el transporte.
Sin embargo, la mayoría de los activistas se congregan en los alrededores de Dannenberg, la localidad más próxima al depósito de Gorleben.
La ruta completa del polémico transporte nuclear permanece en secreto porque la policía alemana prevé continuos bloqueos de las vías del ferrocarril para frenar el convoy a lo largo de los mil kilómetros de trayecto en tren por tierras alemanas hasta Dannenberg.
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