Para acelerar la aprobación en el Congreso del proyecto que otorga facultades sancionadoras a la Contraloría, el presidente de la República, Alan García, planteó modificarlo para que promueva la separación preventiva de los funcionarios involucrados en actos de corrupción.
El jefe del Estado consideró que el mencionado proyecto tendría inconvenientes de alcanzar su aprobación debido a que plantea sanciones, atribución generalmente atribuida al Poder Judicial.
“Tal vez el conflicto sea porque el concepto de sanción está atribuido constitucionalmente al Poder Judicial. Pero para facilitar su aprobación podríamos hablar de medidas precautorias”, sostuvo.
En ese sentido, explicó que al funcionario involucrado en irregularidades no se le sanciona, porque eso le corresponde a los jueces, pero sí le podría separar del cargo preventivamente.
Agregó que de esa manera el Congreso tendrá más facilidad de aprobar el proyecto que facilita el trabajo anticorrupción de la Contraloría.
El proyecto que otorga facultades sancionadoras a la Contraloría ha sido debatido en el Parlamento y en este momento está en un cuarto intermedio para que se consensúe la fórmula legal, que sería votada la próxima semana.
PIDIÓ RENDICIÓN DE CUENTAS
Por otro lado, el jefe de Estado solicitó que aquellos que actuaron indebidamente durante su gobierno rindan cuentas por sus actos.
“Lo único que le he pedido públicamente es que a aquellos que actuaron mal en los últimos cinco años queremos verlos acusados, enjuiciados y tal vez sentenciados”.
Para tal motivo, indicó, se le ha hecho un “liberamiento económico” al Poder Judicial para que aplique velocidad al Nuevo Código Procesal Penal en los casos de corrupción.
“Como estos casos de corrupción han sido denunciados por la Contraloría tendremos tiempo de ver al pillastre, al vivo, al criollazo, al corrupto encadenado y apresado”, apuntó.
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